REFORMA : Se van alimentos ‘hasta las nubes’
19 Abril 2024.
En lo que va del sexenio, comer arroz, frijoles y huevo se encareció 47.5 por ciento, de acuerdo con un análisis de Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).
Durante diciembre de 2018, comprar un kilo de cada uno de los productos mencionados sumaba 82 pesos. En marzo de 2024, el precio de los tres alimentos subió a 121 pesos.
Sin embargo, algunos de los 17 productos de la canasta básica reportaron una inflación acumulada de hasta casi 177 por ciento en el periodo mencionado.
Destaca el incremento del precio del limón sin semilla, que pasó de 15.77 a 43.63 pesos el kilo, un incremento de 176.6 por ciento en lo que va del sexenio, señala el reporte de la consultora.
De igual manera, sobresale el precio de la tortilla, que a inicios del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador costaba alrededor de 14.36 pesos el kilo y ahora vale 23.88 pesos, un incremento de 66.3 por ciento.
De igual manera, sólo los alimentos de la canasta básica derivados de granos acumularon un incremento en sus precios de 40.5 por ciento, con alzas en cada producto de hasta 10 por ciento anual, agrega el documento.
Los alimentos no fueron los únicos productos que se encarecieron en este Gobierno, añade.
Tomando como base los mismos periodos, desde el Gobierno de Ernesto Zedillo la inflación general no había registrado las variaciones que se presentaron durante este Administración.
Juan Carlos Anaya, director general del GCMA, explicó que desde 2019, factores exógenos como la sequía en Brasil, uno de los principales productores de cereales, así como la emergencia sanitaria por el Covid-19 y la invasión a Ucrania incidieron en el encarecimiento de los alimentos derivados de los granos.
Sin embargo, a diferencia de otros países en los que se tuvieron los mismos efectos, en México no se registraron apoyos significativos para los productores de alimentos ni para los consumidores.
“De acuerdo el Coneval, disminuyó el número de pobres, ya que en la mano derecha recibieron mejores ingresos para comprar sus productos, pero con la mano izquierda lo perdieron al aumentar el número de personas que no tiene acceso a la salud y a las medicinas, lo que generó mayores gastos.
Si bien para el especialista, Iniciativas como el Apecic y Pacic, creadas para controlar los efectos de la inflación (especialmente entre 2021 y 2022, cuando se presentaron los mayores aumentos de precios), los resultados finales no impactaron en el consumidor final.
“Fue una buena medida para 24 productos seleccionados, pero lamentablemente en las cadenas del productor y consumidor se observa que los mayores márgenes se quedaron con los autoservicios y mercados”, dijo Anaya.
LOS MÁS CAROS
En lo que va del sexenio, los alimentos del sector frutícola han sido los que más se encarecieron, en línea con la afectación en el campo por la sequía y la falta de apoyos.
Fuente: www.reforma.com