GCMA HA REVISADO A LA BAJA SU ESTIMACIÓN DE PRODUCCIÓN DE MAÍZ PARA EL CICLO OI 2024/25, SITUÁNDOLA EN 3.51 MTM

Esta reducción se debe principalmente a los efectos climáticos en Sinaloa, Sonora y Tamaulipas. Como consecuencia, se prevé un aumento anual del 8.1% en las importaciones, a 25.2 MTM.

Chihuahua: Las siembras del ciclo PV 2025, se proyectan en alrededor de 160 mil hectáreas, de las cuales se prevé que 110 mil se destinarán al maíz amarillo, aproximadamente 40 mil al maíz blanco y 10 mil a maíz forrajero. Se estima que la producción será de aproximadamente 1.95 MTM. No se descarta que los rendimientos puedan verse afectados por posibles problemas en el suministro de energía eléctrica para el bombeo de agua de los pozos.

Bajío: La demanda de maíz en el mercado regional ha disminuido considerablemente, lo que ha provocado una caída en el precio de venta en bodega del maíz a granel en Guanajuato y Michoacán. Los inventarios pendientes de venta en Guanajuato suman 79 mil TM, mientras que en Jalisco alcanzan las 45 mil TM.

Sinaloa: Continúa limitada la oferta de maíz en el mercado local, con un inventario pendiente de venta estimado en alrededor de 60 mil TM.

La superficie sembrada alcanzó 207 mil hectáreas. Sin embargo, GCMA ha ajustado su estimado de producción de 1.971 a 1.807 MTM, debido al estrés hídrico que ya afecta a los cultivos en la zona del norte del estado. Se prevé que la cosecha sea un 42.6% menor a la obtenida en el ciclo anterior, cuando se produjeron 3.146 MTM.

En cuanto a la comercialización de la cosecha, las organizaciones de productores consideran que el mercado libre ofrecerá mejores precios que las coberturas, por lo que planean vender toda la producción en este mercado, esperando precios más altos debido a la menor producción proyectada.

La industria harinera ha mostrado un fuerte interés en adquirir la cosecha a precio de mercado, con un programa de compra de 800 mil TM.

Tamaulipas: En el ciclo OI 2024/25, se sembraron 33 mil hectáreas de maíz. Las perspectivas de producción estarán determinadas por las condiciones climáticas que prevalezcan durante las fases del cultivo. En los últimos días, se han registrado temperaturas de hasta 35 ºC, lo que genera una necesidad urgente de lluvias, especialmente en las zonas de temporal, donde los cultivos ya están experimentando estrés hídrico. Sin embargo, no se esperan precipitaciones en los próximos 15 días, lo que podría afectar el rendimiento.