La Jornada: Inflación agroalimentaria va a la baja pero aún hay productos con incrementos arriba de 60%

Braulio Carbajal | 26 de septiembre del 2024

En la primera quincena de septiembre tanto la inflación general como la agroalimentaria presentaron reducciones significativas; sin embargo, aún existen productos que por diferentes factores, clima o estacionalidad, registran incrementos anuales por encima de 60 por ciento anual como los casos de la fresa y la cebolla.

Igualmente, otros de consumo generalizado, como el jitomate, han disminuido de precio, en comparación con el año pasado.

De acuerdo con un reporte del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA), con base en cifras de la Procuraduría Federal del Consumidor, al cierre de la primera quincena de 2024, el precio de la fresa al consumidor es de 82.46 pesos el kilogramo, un incremento de 64.9 por ciento frente a los 50 pesos promedio que costaba a la misma altura de 2023.

Otro caso relevante es el de la cebolla, cuyo precio promedio es 44.12 pesos por kilogramo, cuando un año antes era de 27.32 pesos, es decir, tiene un alza de 61.5 por ciento.

En la lista se encuentra el brócoli, con una inflación anual de 55.9 por ciento, al ir de 40.40 a 52.98 pesos por kilo; el chile serrano, con 46.4 por ciento, al pasar de 55.05 a 80.62 pesos; el pepino, con 45.6 por ciento, al ir de 23.81 a 34.65 pesos, y el aguacate Hass, que subió de 64.83 a 94.08 pesos por kilogramo, 45.1 por ciento, entre otros.

Del otro lado, productos que presentaron disminuciones importantes fueron el jitomate saladet, con una baja de 5 por ciento al ir de 32.46 a 30.84 pesos; el limón sin semilla, con 18.2 por ciento al ir de 36 a 29.44 pesos, y el chile jalapeño, con una disminución de 38.8 por ciento al bajar de 27.19 a 16.64 pesos el kilo.

Ajuste significativo

En un análisis, el GCMA destacó que la inflación en el sector agroalimentario, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), alcanzó 3.95 por ciento anual, el nivel más bajo desde 2020, reflejando una disminución significativa en comparación con el 5.54 por ciento registrado a inicios de este año, cuando se alcanzó el pico inflacionario en alimentos. Esto podría significar una mejora en la oferta de alimentos, ofreciendo precios más estabilizados en frutas, hortalizas y granos, señaló.

El reporte del organismo privado incluye solamente 20 productos que se encuentran en la categoría de frutas y hortalizas, mientras el del Inegi es un índice que da cuenta de cientos de agroalimentos.

El GCMA destacó que de acuerdo con el Inegi, la inflación en México correspondiente a la primera quincena de septiembre de 2024 registró una tasa general de 4.66 por ciento anual, lo que desde su perspectiva ofrece un panorama alentador al marcar el nivel más bajo de los últimos cuatro meses.

Este descenso es especialmente significativo si se compara con el 5.57 por ciento registrado en julio, que representó el punto máximo de inflación en lo que va del año. La reducción de 16.34 por ciento respecto a julio indica que las presiones inflacionarias han comenzado a ceder, lo que puede atribuirse a varios factores estructurales y coyunturales que han impactado tanto los precios de los bienes subyacentes como no subyacentes, explicó en un documento.

Fuente: La Jornada